Usamos energía para el desarrollo de todas nuestras actividades cotidianas. Si estás leyendo estas palabras es porque el suministro eléctrico llega a tu ordenador o tienes cargada la batería de tu móvil. Nuestra vida se ha vuelto “electrodependiente”. Cuando encendemos la luz, pocas veces nos paramos a pensar la historia del electrón que utilizamos. De dónde viene, cómo se produjo, quién me lo trae a casa o a quién se lo pago.
El mercado de la energía tiene muchos agentes implicados y a veces confundimos el papel que desempeña cada uno.
La generación de energía en España ya implica un complejo entramado de empresas y acuerdos internacionales para abastecernos de materias primas que las empresas generadoras transformarán en energía.
Hablamos de carbón, gas, petróleo, energía nuclear y materias primas no renovables de origen fósil y empresas que utilizan la energía eólica, hidráulica, solar, geotermia y otros sistemas de renovables.
España necesita comprar mucha materia prima en el extranjero para generar energía y de hecho, según el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima «el sistema energético [nacional] se caracteriza por una elevada dependencia energética, ya que alcanza el 74%, muy por encima de la media de la UE (54%)».
Compramos carbón, petróleo y gas a terceros países; nuestro principal proveedor es Nigeria.
Pero tenemos buenas noticias; el sector energético renovable crece a buen ritmo (y el sol y el viento no se lo compramos a nadie). Hay muchas empresas generadoras de energía en España, tanto renovable como fósil.
Una vez generada la energía, independientemente del sistema, la electricidad se vierte a la red eléctrica, al tendido eléctrico que como una malla cubre todo nuestro territorio. Las empresas propietarias de los cables, centros de transformación, subestaciones…, son las distribuidoras que en varios sistemas (alta, media y baja tensión) llevan la energía a los diferentes puntos de suministro. Toda la producción se vierte a la misma red y se mezcla, por lo que no es posible diferenciar en el transporte qué energía es de origen renovable y cuál no. (ver 3.- ¿qué es el GdO?)
El transporte y distribución de la energía en España está en manos de pocas compañías distribuidoras, que son “las dueñas de los cables” para entendernos, de hecho, sólo son cinco las compañías que cubren casi todo el territorio peninsular e insular español. Las distinguirás porque habitualmente su nombre va acompañado de la palabra “distribución”. En la Comunitat Valenciana, la empresa distribuidora de energía de referencia es i-DE (Iberdrola-distribución). Pero como bien sabes, existen territorios donde la distribución está en manos de empresas 100% participadas por cooperativas. En la Comunitat Valenciana tenemos 1195 kilómetros de líneas de distribución cooperativizadas.
Las distribuidoras son las que tienen que resolver los problemas que haya en la red eléctrica que lleva la luz hasta tu contador. Lo habitual no es tener el contador en propiedad, sino que sea propiedad de la distribuidora, a la que le abonamos un importe mensual en concepto de alquiler y mantenimiento que viene reflejado en la factura que nos manda nuestra comercializadora.
De puertas adentro de tu punto de suministro (vivienda, local, comercio, empresa…) operan, “comercializan”, las empresas comercializadoras con las que estableces el acuerdo comercial (contrato) sobre el precio, duración y servicio de tu suministro eléctrico.
Empresas comercializadoras hay más de 600 (ver 2.-¿En qué mercado estoy?) y la energía se comercializa de varias maneras; en el mercado libre, indexado y regulado.
Es muy importante entender que hay grupos empresariales muy poderosos que tienen empresas en todas las fases del mercado energético: son generadoras y al mismo tiempo, distribuidoras y comercializadoras; reguladas y libres. Esta presencia del mismo grupo empresarial en toda la vida de nuestro electrón puede llegar a confundirnos. A pesar de ser del mismo grupo empresarial, se trata de empresas diferenciadas, con CIFs diferentes.
Puedes imaginar ya cuáles son las empresas que tienen el poder suficiente para monopolizar el mercado energético.
A pesar de que hablamos de la existencia de muchas comercializadoras, la realidad, es que más del 90% de los clientes que “compramos” energía en el mercado energético estamos en muy pocas manos (en muy pocos grupos empresariales). En muchos foros, oirás hablar de ellas como: “las empresas del oligopolio”.
Recuerda: Entender el complejo mundo de la energía requiere conocer todas las alternativas posibles tanto en la generación, distribución y comercialización de la misma.
Ver más:
4.-¿Qué compramos en el recibo de la luz?
5.-¿Qué nos venden?
8.-¿Cómo funciona el contador inteligente?
11.-¿Cómo se mide la energía que consumo en casa?
12.-¿Me puedo instalar fotovoltaica en casa?
